ENSALADA TEMPLADA DE POLLO CON VINAGRETA DE CARAMELO... mi buena voluntad
Cuando comencé con esto del blog, me prometí que habrían tres temas que nunca tocaría; la política, el fútbol y la tan temida y odiosa…Operación Bikini. Hoy voy a romper esa promesa.
Y no voy a hacerlo hablando de aquellos que se dedican a prometer lo que no cumplen, ni a hacerlo de aquellos que siendo promesas de lo suyo nos dan alegrías o disgustos, dependiendo de su racha. Así que sintiéndolo mucho, sólo me queda la tercera opción. Sí, sí, lo siento… os aseguro que yo no iba a hablar nunca de ella, que iba a pasar por la vida como si no existiera, que iba a obviar los emails en los que me pedís que quite ya la tarta de chocolate y frambuesa que tanto daño visual os está haciendo, pero la corriente me lleva irrefrenablemente a ella. Y es que, a riesgo de ir a la playa con el flotador puesto, he decido comer sólo para vivir. Ensaladas, carnes y pescados a la plancha y fruta compondrán mi alimentación en los próximos días. ¿Triste? sí, ¿necesario? también.
Así que, sin contar con el bizcocho que os traeré la semana que viene, ni con el Desafío salado de este mes, ni con el refrescante y dulce broche con el que daré por terminado el curso blogueril a finales de junio hasta septiembre, este mes toca comer sano… en definitiva, que a un post por semana, vosotros ni os vais a enterar, aunque espero que yo sí, jeje. Como gesto de mi buena voluntad (a ver lo que me dura) hoy he decido mostraros: LA ENSALADA.
Y no voy a hacerlo hablando de aquellos que se dedican a prometer lo que no cumplen, ni a hacerlo de aquellos que siendo promesas de lo suyo nos dan alegrías o disgustos, dependiendo de su racha. Así que sintiéndolo mucho, sólo me queda la tercera opción. Sí, sí, lo siento… os aseguro que yo no iba a hablar nunca de ella, que iba a pasar por la vida como si no existiera, que iba a obviar los emails en los que me pedís que quite ya la tarta de chocolate y frambuesa que tanto daño visual os está haciendo, pero la corriente me lleva irrefrenablemente a ella. Y es que, a riesgo de ir a la playa con el flotador puesto, he decido comer sólo para vivir. Ensaladas, carnes y pescados a la plancha y fruta compondrán mi alimentación en los próximos días. ¿Triste? sí, ¿necesario? también.
Así que, sin contar con el bizcocho que os traeré la semana que viene, ni con el Desafío salado de este mes, ni con el refrescante y dulce broche con el que daré por terminado el curso blogueril a finales de junio hasta septiembre, este mes toca comer sano… en definitiva, que a un post por semana, vosotros ni os vais a enterar, aunque espero que yo sí, jeje. Como gesto de mi buena voluntad (a ver lo que me dura) hoy he decido mostraros: LA ENSALADA.
La receta nos la hicieron en la clase de navidad de Thermomix y también sale en la revista de entonces. En su versión original, le ponen uvas y semillas de sésamo, pero yo lo he modificado por unos tomates cherry y unas nueces, podéis hacerlo como más os guste, o dependiendo para lo que la queráis, de las dos maneras está riquísima.
PARA LA VINAGRETA CON POLLO
60 gr de aceite de oliva virgen extra
1-2 dientes de ajo
2-3 filetes de pollo en tiras 300-350 gr (contramuslo o solomillo de pechuga, que es más tierno)
Sal y pimienta
30-40 gr de caramelo líquido
20 gr de vinagre de manzana
50 gr de pasas sin semillas
PARA EL RESTO DE LA ENSALADA
Nueces
Tomates cherry
Lechuga (o cualquier hoja de ensalada)
Picamos finamente el ajo y sofreímos en el aceite con cuidado de no quemar el ajo. Con Thermomix, troceamos todo junto 3 segundos a velocidad 5 y sofreímos 6 minutos, temperatura Varoma, velocidad 1.
Añadimos el pollo cortado en tiras, sal y pimienta al gusto, el caramelo, las pasas y el vinagre y sofreímos durante 7 minutos más. Con Thermomix, 7 minutos, temperatura Varoma, giro izquierda y velocidad 1, sin poner el cubilete para favorecer la evaporación.
Mientras se hace el pollo, cortamos los tomates cherry por la mitad y cortamos y limpiamos la lechuga. Ponemos las hojas verdes en el plato de servir, echamos por encima la vinagreta con el pollo y distribuimos los tomates y las nueces.
Servimos inmediatamente, ya que es una ensalada que se come templada.
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